Este refrán hace referencia a la ley de causa efecto, donde si bien se abre la posibilidad de que ocurre un efecto, aunque no conozcamos bien la causa, de algún modo será manifestado su efecto y es ahí como lo conoceremos. La percepción por tanto debe ser sensorial y en este caso alude al sentido del oído, pero no debe extralimitarse a esto pues dicho verbo también es usado para mostrar consciencia de las cosas. Cuando algo te suena, es que ya la conoces.