Este refrán significa que no se debe criticar publicamente a nadie, y especialmente a los amigos. Lo mejor es después de que pase el malentendido, hablarlo en privado con el interesado.
Este refrán significa que no se debe criticar publicamente a nadie, y especialmente a los amigos. Lo mejor es después de que pase el malentendido, hablarlo en privado con el interesado.