Este refrán cuenta que la mirada desvela el estado de ánimo en el que nos encontramos, y por mucho que queramos ocultarlo con otros gestos o dichos, la mirada y los ojos desvelan nuestro estado de ánimo.
Este refrán cuenta que la mirada desvela el estado de ánimo en el que nos encontramos, y por mucho que queramos ocultarlo con otros gestos o dichos, la mirada y los ojos desvelan nuestro estado de ánimo.