Este dicho alude al sueño como una visión ambiciosa de la realidad y con su componente de vanidad. Es decir, algunas personas parece estar llenas de presunción y vanidad, y con este refrán pueden ser atacadas, puesto que les dices que sus pretensiones o presunciones son simplemente sueños que incluso tal vez tenga otros como tú mismo. En los sueños se crea una realidad favorable que permite satisfacer el deseo. Si eres una pulga, lógicamente tendrás la capacidad de saltar.