Este refrán define a la alegría como algo sino instantáneo, bastante fugaz, pasajero. Contrariamente a lo que sería un estado de pasividad, la alegría hace que se fluctúe en un corto período de tiempo, o al menos así nos lo parece al establecer la unidad en un día frente a una temporada o un año.
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- Las penas son cadenas
- La mayor desgracia no es tenerla, sino merecerla
- Los males hacen amistades
- Nadie es adivino del mal que está vecino
- Los duelos con pan son menos