Este refrán te da un mensaje muy claro, un consejo donde debes bajarte para poder llegar a tu objetivo, y esto es algo que se puede interpretar acerca de lo que es la actitud y el comportamiento, donde si eres humilde y sumiso, llegarás lejos. También alude al tema espiritual y religioso puesto que puede referirse a entrar en las puerta del cielo, pero siempre desde dicha actitud de obediencia.